Cómo desarrollar un mindset de crecimiento (parte II)

«La excelencia de un líder se mide por la capacidad para transformar los problemas en oportunidades» Peter Drucker

La mindset o mentalidad de crecimiento significa que uno acepta los desafíos, persiste frente a los contratiempos, asume la responsabilidad de sus palabras y acciones y reconoce que el esfuerzo es el camino hacia el dominio, «la práctica hace al maestro».

La mentalidad de crecimiento, consiste en tener la consciencia de que la inteligencia no es fija y que con un aprendizaje diario y el interés de tener nuevos retos se logra preparar el terreno para cumplir metas y alcanzar logros.

Cambiar la mentalidad de una persona desde una perspectiva fija a una mindset de crecimiento puede parecer complicado, pero dando pequeños pasos podemos desarrollar este tipo de mindset. A modo de ejemplo planteamos diferentes caminos: 

1. Reconocer y aceptar la imperfección en uno mismo y en los demás.  Todos tenemos nuestros defectos, peculiaridades y rarezas: nuestras imperfecciones y vulnerabilidades.  Nuestras imperfecciones nos hacen únicos, aceptarlas es la camino para el desarrollo.

2. Afrontar tus desafíos con valentía, asumiendo riesgos.  Si sientes miedo ante un desafío, detente y replanteate la situación.  Considera el desafío como una oportunidad, cambiando ligeramente tu perspectiva, tu mirada, inicia paso a paso e irás adquiriendo energía y seguridad. Cada desafío u oportunidad nos invita a una nueva experiencia que es una especie de aventura.

El miedo es un sentimiento, escúchalo, hazte amigo de él. Sigue adelante de todos modos, cruza el miedo, porque tu desafío es emocionante.  Si adoptas esta actitud puede descubrir habilidades que ni siquiera sabía que poseía. Arriesga a probar nuevas maneras de interactuar con otros, ver diferentes puntos de vista, otras formas de ser y estar. 

3. Presta atención a tus palabras y pensamientos.  Empieza a prestar atención a las palabras que te dices, a las narraciones que construyes de ti y que te cuentas.  Si tus palabras son de desánimo y supercríticas, los resultados se verán limitados. Así que ten cuidado.  Escucha lo que está diciendo y pensando, se amable contigo mismo.

Reemplaza los pensamientos negativos por otros más positivos para desarrollar una mentalidad de crecimiento.  Reemplaza el juicio por la aceptación, el odio por la compasión.  Si te estás faltando el respeto a tí mismo, el resultado de tus decisiones y sus consecuencias lo reflejarán.  Intenta tener pensamientos más elevados y mantente firme.

4. Deja de buscar la aprobación de los demás.  La aprobación de los demás a menudo puede alejarte de un mindset de crecimiento.  Cultiva la autoaceptación y la autoaprobación.  Aprenda a confiar en sí mismo.  Eres la única persona que siempre estará ahí para ti en tu vida, así que eres el único al que necesitas impresionar.

5. Da un paso más hacia la autenticidad.  Fingir ser alguien que no eres es una falta de respeto a quien realmente eres.  Te hace falso.  Disminuye lo que tienes que ofrecer.  Llegar a ser verdaderamente auténtico, aceptarte y mostrarte como eres, es un proceso que requiere tiempo y mucho trabajo interno.  Una vez que lo hagas, es probable que te sientas más impulsado a perseguir sus verdaderos objetivos, lo que te coloca en una mentalidad de crecimiento.

6. Cultiva un sentido de propósito.  ¿Sientes que tu vida tiene un propósito?  En caso afirmativo, define este propósito y describe su alcance.  Si te quedas en blanco, tendraás que clarificar lo que te mueve, tu propósito de su vida. Tener claro tu propósito te ayudará a desarrollar una mentalidad de crecimiento.

7. Todos tenemos fortalezas y debilidades.  Explora y aprecia sus fortalezas y trabaja para mejorar sus debilidades.  Este esfuerzo puede ayudarte a desarrollar una mentalidad de crecimiento.

8. Dale la vuelta a la crítica hasta que encuentres el aprendizaje.  El propósito de la crítica es mejorar las cosas.  Otras personas pueden ver lo que estás haciendo desde una perspectiva ligeramente diferente a la tuya y pueden tener algunas sugerencias valiosas para tí.  Si te abre a escuchar sugerencias, respirando, desde la humildad del aprendiz, puedes desarrollar más fácilmente tu mentalidad de crecimiento.

Tener una mindset de crecimiento no solo significa ser abiertos y aceptar los comentarios de los demás. Significa aceptarlos y aprender de la experiencia, y así desarrollar estrategias para mejorar. 

9. Valora el proceso sobre el resultado final.  Recuerda, lo que importa es el viaje, no el destino.

10. Aprende de los errores de los demás.  Si puede aprender de los errores de los demás, podrás cometer menos errores.  A veces, esto puede calmar el miedo a probar cosas nuevas, un aspecto clave para desarrollar una mentalidad de crecimiento.

11. «Todavía no está bien».  Cuando tengas dificultades con una tarea, recuerda que no la has dominado «todavía».  Si te mantienes, el tiempo y la práctica te llevará a la mejora y al autodesarrollo.

12. Asumir riesgos en compañía de otros.  Trata de no tomarte demasiado en serio.  Estate dispuesto a cometer errores frente a los demás, porque si estás creciendo, es probable que esto suceda.  Y cometer errores frente a otros generalmente será más fácil con la práctica.

13. Sé realista.  Se necesita tiempo, a veces mucho tiempo, para aprender una nueva habilidad, como aprender un nuevo idioma o aprender a tocar un instrumento o aprender a convertirse en un buen abogado.  Tener esto en cuenta puede ayudar con una mentalidad de crecimiento.

14. La velocidad no es importante.  Cuando tienes un mindset de crecimiento, los resultados finales son menos importantes.  Te involucra y te esfuerzas por completo en el proceso, sin importar cuánto tiempo tome.  Centrarse en el proceso a menudo también mejora los resultados porque se pone más esfuerzo en el camino.

15. Sé dueño de su actitud.  Si valoras tener una mindset de crecimiento, tómese el tiempo y haz el esfuerzo de desarrollarlo.  Persiste y las oportunidades aparecerán.  Cultiva la resiliencia a lo largo del camino. 

La neurobiología en la actualidad nos ha demostrado en numerosos estudios de evidencia científica, que nuestro cerebro es maleable, el cual puede ser transformado, creando nuevos patrones y recorridos neuronales para la creación de nuevos hábitos de pensamiento, así mismo, que a partir del entrenamiento, la constancia y el cultivo de un estado emocional de apertura y ambición, donde el preocuparme del cómo me siento es tan importante, como el desempeño en la realización de cualquier tarea o actividad, transforman mi mentalidad en un mindset de crecimiento.

De la misma manera, los avances en la neurociencia nos demuestran que el aprendizaje es exponencial, lo que nos pone en un escenario de inmensas posibilidades.

Si quieres que te acompañemos en este proceso de crecimiento contacta conmigo

Referencias

Dweck, C. S. (2008).  Mentalidad: la nueva psicología del éxito.  House Digital, Inc. Chicago

Qué es el mindset (parte I)

En los tiempos que vivimos de una sociedad hiperacelerada e hiperconectada todo el mundo empieza a hablar de «mindset». En diversas salas de una nueva red social ClubHouse se organizan charlas para hablar de cómo potenciar el mindet. Muchos profesionales de la consultoria, mentores, coaches empiezan a denominar se expertos en mindset, «experto en mentalidad».

Habrá que aclarar ¿qué es el mindset? En psicología cognitiva, el mindset es la mentalidad que representa los procesos cognitivos activados en respuesta a una tarea determinada. La psicología nos ofrece mapas para poder comprender e intervenir.

La mentalidad se define como el conjunto de actitudes y creencias que mantenemos, que afectan todo lo que hacemos, sentimos, pensamos y experimentamos.  Nuestra mentalidad influye en nuestras percepciones y en cómo nos movemos por el mundo.  Aunque tenemos una mentalidad general, esta puede estar formada por muchas mentalidades más pequeñas. Algunas de estas nos ayudan a mejorar nuestro bienestar y tener éxito en el mundo.  Otras dañan nuestra capacidad para hacerlo.  Es por eso que desarrollar ciertas mentalidades puede ayudarnos a alcanzar nuestras metas, disfrutar de nuestras vidas y tener más éxito. Lo mejor es que alcanzar tener una mentalidad adecuada para tus retos se puede desarrollar, si tu lo deseas te podemos acompañar.

Según Carol Dweck, existen diferentes tipos tipos de mentalidades (crecimiento, positiva, de desafío, de abundancia…). Cada una de éstas, forma un continuo con dos categorías en sus extremos. Por ejemplo el mindset o mentalidad de crecimiento versus la mentalidad fija. Ambas forman parte de un continuo que pueden agrupar a las personas según su comportamiento, específicamente por su reacción al fracaso. En este tipo de mindset nos centraremos en este artículo.

Las personas que tienen una «mentalidad fija» creen que las habilidades son en su mayoría innatas e interpretan el fracaso como la falta de las habilidades básicas necesarias, mientras que los que tienen una «mentalidad de crecimiento» creen que pueden adquirir cualquier habilidad dada siempre que inviertan esfuerzo o estudio.

Dweck argumenta que la mentalidad de crecimiento «permitirá a una persona vivir una vida menos estresante y más exitosa», por su confianza con las posibilidades de adquirir nuevos aprendizajes para nuevos retos o contextos.

¿Qué es la mentalidad de crecimiento?

Como hemos indicado, hay una variedad de mentalidades, cada una de las cuales puede ayudar o perjudicar nuestro bienestar.  Una mentalidad de crecimiento es simplemente la creencia de que nuestras habilidades básicas se pueden desarrollar y mejorar a través del aprendizaje, dedicación y trabajo.  Sin una mentalidad de crecimiento, no ejercemos el esfuerzo requerido y, por lo tanto, permanecemos atrapados perpetuamente, desde la resignación o el resentimiento.

Con un mindset de crecimiento, podemos superar el estancamiento y lograr las metas a largo plazo que deseamos, en cualquier ámbito de la vida, ya sea en el trabajo, en nuestras relaciones o en otros aspectos.

¿Tienes una mentalidad de crecimiento?

¿Crees que naciste y te criaste con un conjunto fijo de habilidades y capacidades, como tu coeficiente intelectual, que traes desde tu nacimiento y que permanecerá contigo toda tu vida?  ¿O cree que tus ideas y creencias están en constante evolución, que puedes aprender nuevas habilidades si trabaja en ellas y que tu sabiduría e inteligencia aumentan con cada nueva experiencia? 

Si respondes «sí» a la primera pregunta, tiene lo que se conoce como una «mentalidad fija».  Si tu respuesta es “si” a la segunda pregunta, probablemente tengas lo que Dweck llama una mentalidad o mindset de crecimiento.

No te preocupes si actualmente tienes una mentalidad más fija: es posible desarrollar una mentalidad de crecimiento.

¿Por qué es importante la mentalidad de crecimiento?

Si tenemos una mentalidad fija, es posible que evitemos los desafíos porque no queremos sentirnos avergonzados o humillados frente a los demás.  Ésto puede ser problemático, miedo a cometer errores puede llevarnos a evitar desafíos y nuevas experiencias, experiencias que nos ayudarían a crecer, mejorarnos de manera importante y crear la vida que deseamos.

Si tenemos una mentalidad de crecimiento, disfrutamos de los desafíos, a pesar del riesgo, generalmente porque valoramos el aprendizaje y el crecimiento más que otros . Creemos que podemos y por eso realmente trabajamos en ello.

Desarrollar una mentalidad de crecimiento podría contribuir a una vida más plena y significativa porque la gama de experiencias que abarca esa vida será considerablemente más amplia.

Diferencias clave entre la mentalidad «fija» y «de crecimiento»

Esfuerzo. Cuando se enfrenta al trabajo duro, la persona con «mentalidad fija» puede reclutar a otros para hacer las partes más difíciles, gastando el menor esfuerzo posible, mientras que la persona con «mentalidad de crecimiento» cree que los buenos resultados a menudo requieren esfuerzo; el «esfuerzo» es una parte del proceso.  Para dominar una nueva tarea, generalmente es necesario aplicar energía, ya sea mental, física o simplemente mediante la repetición a lo largo del tiempo.

Desafío. Una persona con “mentalidad fija” evita los desafíos, posiblemente por miedo al fracaso, y puede esconderse como una forma de evitar responsabilidades.  En contraste, la persona con «mentalidad de crecimiento» encuentra que los desafíos son emocionantes y atractivos, sabiendo que aprenderá algo valioso de sus experiencias.  Ellos miran de frente al desafío, lo abrazan y son capaces de avanzar hacia logros cada vez mayores.

Errores y comentarios. La persona con «mentalidad fija» odia cometer errores porque no sabe gestionar sus emociones. Pueden culpar a los demás o ponerse a la defensiva cuando los critiquen.  Una persona con «mentalidad de crecimiento» verá el error como una lección de la que aprender y será menos probable que se tome las críticas como algo personal.  Estar abierto a las críticas puede ayudar a mejorar la capacidad de uno para hacerlo mejor la próxima vez, que es otra razón por la que una mentalidad de crecimiento puede conducir al éxito.

Referencias

Dweck, C. S. (2008).  Mindset: The New Psychology of Success  Updated Edition

Ricard Guillem Guillem, Psicólogo Coach
wa.me/34636705232

8 Marzo 2021 y FP

Feliz día de la mujer, que celebramos todas las personas que somos consciente que el mundo está gritando que necesita una mirada, un ser y hacer más de mujer. Un mundo que tenga más nombres de mujeres: Justicia, Democracia y Libertad. #8Marzo2021

Como sociedad tenemos muchos restos, uno de ellos que la mujer esté más presente en la #FP . “Si + FP es + Futuro” , la FP necesita mujeres.

Las mujeres están menos presentes en la Formación Profesional. Según el Observatorio de la FP de la Fundación Bankia por la Formación Dual (1) la matriculación femenina en FP y en FP dual crece a mayor ritmo que la masculina, pero el peso de las mujeres sigue siendo inferior al de los hombres en ambos casos (44% y 38%).

Cuando las mujeres estudian FP suelen hacerlo en titulaciones feminizadas (sanitaria, sociocultural, administración..) que tienen peor inserción laboral y condiciones laborales mejorables. Su matricula en ciclos formativos típicamente masculinos (Instalación y mantenimiento, Fabricación mecánica, Informática y comunicaciones, Electricidad y electrónica .. ) es muy baja, curiosamente es la formación con mayor inserción laboral y con mejores condiciones laborales.

El itinerario formativo a través de la Formación Profesional es tan válido como cualquier otro itinerario. Y no supone el final de un itinerario formativo y profesional, en un contexto de aprendizaje de aprendizaje a lo largo de la vida, es una pieza más del puzle de la cualificación y de la carrera profesional.

Mucho por hacer:

  • Orientación profesional libre de estereotipos de genero.
  • Visibilizar a mujeres profesionales en puestos masculinizados.
  • Promover las STEM entre la mujeres (sin olvidar que ya están muy presente en las ciencias sociales)
  • Igualdad laboral …

(1) Se puede consultar el informe del Observatorio FP en el siguiente enlace